Medio: El Universo

El Gobierno se distancia de las propuestas de reforma a la Ley de Comunicación, planteados desde varios grupos, que surgieron aprovechando el llamado al Diálogo Nacional, convocado por el presidente Lenín Moreno. El secretario de Comunicación (Secom) del Palacio de Gobierno, Álex Mora, afirmó ayer que es “momento de entrar a un proceso de revisión, muy fino” que se hará en la mesa de Acuerdo por la Información, pero lamentó que quieran convertir esta “posible revisión en las prioridades del Gobierno”.

“Se traen propuestas de reforma hechas por periodistas, escuchando solo a periodistas. En pocas palabras, una ley a la medida de los medios de comunicación, y tampoco podemos retroceder en eso”, aclaró Mora en un foro de análisis de la ley, que organizó el asambleísta de AP Jorge Yunda, al que acudieron representantes de la sociedad y de la Superintendencia de Comunicación (Supercom).

En la Asamblea reposan cinco proyectos de reformas y uno de derogatoria, desde el anterior periodo legislativo.

A estos pedidos se suman el de Romel Jurado, coautor del cuerpo legal, quien presentó un documento con temas que se pueden “debatir” a Mora, a finales de mayo; y el otro, presentado por Centro Democrático (CD) el pasado 13 de junio y que fue entregado a Yunda.

A EL UNIVERSO Jurado explicó que se debe discutir el linchamiento mediático, porque no ha sido entendido ni por las autoridades. “Esta figura nació para proteger a las personas de la práctica injusta e inmoral de usar de manera abusiva uno o más medios para afectar la honra de una persona por razones políticas, económicas y personales”, expresó.

Añadió que se deben crear otros mecanismos para sancionar que no sean necesariamente económicos, sino por ejemplo, llegar a acuerdo de reparación con el medio sancionado.

Mientras, el líder de CD, Jimmy Jairala, cree que debe eliminarse la Supercom y el Consejo de Regulación de la Comunicación (Cordicom), pues se “convirtieron en inquisidores y aplicadores de multas”.

Propone integrar un consejo de once representantes de instituciones del Estado.

Sin embargo, en el marco de este foro, Elsa Quispe, funcionaria de la Supercom, defendió a la entidad, y anotó que si la eliminan la ley será “de papel”.

Esgrimió que en los cuatro años de vigencia del articulado se registraron 550 denuncias, de ellas, 306 eran ciudadanas.

Roberto Manciatti, delegado de los Canales Comunitarios y Regionales (CCREA), recordó los aspectos de la norma que no se han cumplido, como la elección de los defensores de audiencias, así como la distribución de frecuencias del Estado, en un 34 % para medios comunitarios.

Guadalupe Fierro, presidenta de la Unión Nacional de Periodistas (UNP), insistió en que se elimine la Supercom, además que se suprima la palabra “servicio público”, el linchamiento mediático y se elabore “una nueva Ley de Comunicación”.

Yunda, al final de este acto, se comprometió a “tocar puertas” para poder impulsar las modificaciones.

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